Tras un año de pandemia, la evidencia científica nos aporta los siguientes datos: las personas con exceso de peso tienen un 78% más riesgo de ingreso en UCI respecto a la población con un peso normal, y el riesgo de mortalidad es un 48% superior.
No hacía falta que apareciera el COVID19 para saber que la práctica habitual de ejercicio previene ante la obesidad, hipertensión y diabetes, además de otras muchas patologías.
En las Rozas siempre se ha fomentado la práctica de ejercicio. Se frecuentaban con asiduidad los gimnasios de los polideportivos municipales que, además contaban con máquinas de calidad y profesionales expertos en asesorar a quienes se iniciaban en ello.
¿Por qué los gimnasios de los polideportivos siguen cerrados? Las piscinas están abiertas, con aforo limitado y con todas las medidas de seguridad, los numerosos clubes utilizan las instalaciones municipales a diario, mientras muchas de las escuelas municipales han vuelto a cancelar sus clases. ¿Los deportistas federados son más inmunes al virus que quienes no estén federados? Limitar aforo, control de temperatura a la entrada el uso obligatorio de mascarilla FFP2, aumentar la ventilación para renovar el aire midiendo su calidad con sensores de CO2, colocar suficientes purificadores con filtros HEPA 14 o 15, limpieza constante antes y después del uso de cada máquina por el usuario y periódica con viricidas de uso profesional por el servicio de limpieza, son algunas de las medidas que hacen que muchos gimnasios privados sean al menos tan seguros como frecuentar bares y restaurantes, ir en transporte público o acudir a espectáculos y actividades culturales.
Entonces ¿por qué los gimnasios del Ayuntamiento no abren? Porque no hay personal.
En su día no se renovó el contrato que aportaba monitores deportivos (¡que hueco suena lo de “no dejar a nadie atrás”!) y tras su demanda, todo indica que la mejor estrategia “procesal” ha sido dejar un año los gimnasios cerrados para así justificar el “cierre por cese de actividad”. Ser más papista que el Papa en cuanto a la prevención es una excusa